Al parecer estaríamos consumiendo más recursos de los que nuestro querido planeta tierra nos puede proporcionar, lo que nos plantea una problemática totalmente global.
Con una población mundial estimada en 7.000 millones de personas, las agriculturas más tradicionales empiezan a quedarse cortas para abastecer al mundo entero, dejando a la técnica y la tecnología existentes con un rol fundamental en el desarrollo sustentable de la humanidad. Un excelente ejemplo de esto es una granja que se ha probado en Japón (de nuevo los japoneses) y que es cien veces más productiva que los métodos tradicionales.
La característica principal de esta granja es que esta instalada en una nave y se gestiona con luz artificial, convirtiéndola en una granja de interiores donde los LED cumplen un rol fundamental: emular la luz natural a un costo energético muchas veces menor en comparación con otras tecnologías de iluminación de interiores.
Con aproximadamente 2300 metros cuadrados son capaces de producir 10.000 lechugas diarias con un 40% de ahorro energético, así como un método de riego ultra eficiente utilizando el 10% de agua utilizada habitualmente.
Esta primera granja “indoor” se probó por primera vez en Japón, pero a partir de su éxito otros países como Rusia, China, Hong Kong o Mongolia se volvieron interesados en instalar sus propias tecnologías similares. La idea, maximizar la producción minimizando los gastos.
